MAS BELLO QUE LA MUERTE


Me gusta que me dé el sol fuerte en la cara. No me molesta arrugar la frente y que el sol marque mi ceño fruncido. Qué bien se siente el pasto  recién cortado… Me gusta recostarme y girar sobre la dichondra fresca, hasta marearme …


 Sí. Soy una más en este concierto inútil y voraz de pájaros, de insectos.   Generaciones y generaciones de bichos. Nosotros no nos damos cuenta pero no son siempre los mismos. En la naturaleza todo se muere constantemente y nace. Acá tiene que estar la respuesta. Este verde, esta brisa, no pueden estar equivocados. Acá importa la especie, no la individualidad. A mí, me da qué pensar todo esto muriéndose continuamente, el dolor desaparece en la tierra y todo lo sepultado está generando más vida en este preciso momento... y el humano que sufre tanto por cada cosita que pierde !!!… qué se yo…


Cada vez son menos las cigarras, las mariposas, las libélulas, los grillos, las vaquitas de San Antonio, los cascarudos,  las gatas peludas, las lombrices, los sapitos, las ranitas, los bichitos de luz, los bicho canasto, los bicho bolita,  los picaflores, las torcazas, los benteveos,  los caranchos, los loros, las cotorras, las calandrias, los horneros, los jilgueros, los boyeritos, los estorninos, las monjitas, las totoras, las hurracas, los teros, …
Las tortugas ¡están en extinción !...


Yo perdí un hijo. Todos decían que era idéntico a mí, pero, idéntico eh? Qué tontería. La gente cuando ve un bebé recién nacido dice tantas cosas lindas.  Nunca más volví a probar ese amor tan inmensamente chiquitito, esa piel reticuladita, ese amor que entra por las venas, y que me hizo sentir  que mi vida ya no era mía… nunca más.


Pero sigo creyendo que hay que darle espacio al amor, que las mujeres somos madres
siempre, tengamos o no hijos, y que nunca cerramos los ojos, aunque vayamos por
la vida con anteojos de sol para disimular el paso del tiempo. 


Lo peor de envejecer no son las arrugas, ni las consecuencias de la ley de
gravedad. Son los recuerdos, las escenas maduradas en el cuerpo. Si fueron
felices, con el tiempo se vuelven nostálgicas,

y la nostalgia, ¿no es 
tristeza con sonrisa?

 
Sonia Novello. 
Este texto pertenece a un personaje de mi obra de teatro llamada "Más bello que la muerte"





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